martes, 28 de diciembre de 2010

OTRO AÑO QUE PASA OTRO QUE VIENE 2010-2011

  
Este año tuvo de todo, cosas buenas, malas, no tan buenas, no tan malas, malas, muy malas, terribles; encuentros, reencuentros, despedidas desengaños, lagrimas, risas, alegrías, felicidad, amores, entregas, travesuras, aventuras, conocidos, alegatos, discusiones, reconciliaciones, tertulias, carcajadas, caminatas, corridas, carreras, pasarelas, desfiles, chismoseadas, rajadas, viajes, paseos, locuras, corduras, inmadureces, reflexiones, un año productivo con mucho aprendido, mucho ganado, algo perdido.

El balance parece positivo, “unas por otras” dicen por ahí, recupere personas que creía perdidas y perdí otras que creía ganadas, dolió perderlas claro, como cuando del cuerpo desprenden una apéndice, al comienzo es extraño, después la extrañas, mientras te recuperas de la herida que se hizo para la extracción duele y si no haces la curación correcta ni te tomas los medicamentos adecuados para que no se infecte, habrán problemas y durara más el periodo de convalecencia, pero al seguir las recomendaciones médicas la herida sana pronto, por fuera y de a poquitos se restaura el tejido interno, en el caso de las personas perdidas las recomendaciones las da la experiencia más de dos décadas vividas han de servir de algo más que para aumentar años.

Los desprendimientos son dolorosos y dependiendo de la persona tardan más en recuperarse los tejidos internos, por lo general la herida externa es rápidamente sellada por un efectivo cicatrizante el orgullo, el primer paso es coger puntos que se cumple con una sensata disculpa si uno es el culpable o paciencia y oídos atentos a la disculpa si son solicitadas por el otro, el perdón y la humildad primero, si pasado este paso aun el alejamiento es inminente no hay nada más efectivo que una dosis de orgullo acompañada de unos tragos o si lo prefieres alguna sustancia que te de clama por un tiempo, esto es una etapa no permanente, después la herida queda cicatrizada perfectamente en el exterior ahora la procesión va por dentro los tejidos tardan y de vez en cuando alguna punzada se siente, pero con paciencia hasta olvidas y ni recuerdas porque fue el problema, pero sabes que si ya está hecho pues debes continuar y dejar que todo fluya hay quienes tardan tanto en cicatrizar que cuando tú ya has sanado viene y coger puntos con una sensata aunque tardía disculpa, si esto sucede es bueno aceptarla “no olvides que el perdón es lo divino y errar a veces suele ser humano” algún día tú también querrás ese perdón que es un bálsamo para el alma.

La pérdida de alguien duele en la medida que lo quieres, y falta en la medida que compartes, si es una persona muy amada pero con la que se comparte poco duele hasta los huesos pero no te percatas frecuentemente del dolor, si es alguien con quien compartes mucho, va a doler repetitivamente y dependiendo del cariño con mayor o menor intensidad, la herida más grave y que suele amenazar con desangrar es la del amigo con el que casi que vives y además adoras, esa te duele en proporciones inimaginables, al fin de cuenta a la tuza de pareja uno se acostumbra, la familia nunca lo abandona, pero la tusa de amigo entrañable no se cura sino con tiempo y paciencia, con clama y con reflexión, no vale la pena perder esos amigos por bobadas es mejor ceder dar el brazo a torcer pronto antes de que la herida carcoma e infecte, si aun así es necesaria la separación pues se siente como amputar un miembro principal dícese de pierna brazo, de eso que ya sin tenerlo aun rasca el dedo gordo, ese amigo al que ya no le hablas pero es inevitable no llamarlo el día del cumpleaños, no querer ser su paño de lágrimas si lo ves llorar y no ser el primer número que uno marca si la traga maluca reapareció, es así de simple esos amigos dejan huella, marcan y la tusa no se pasa con otro amigo, nadie lo va a suplir, ni nadie sabe tantos secretos ni entiende tan fácil tus actos, así que es una tusa solitaria  pero valga decirlo muy sustanciosa, en el camino se crece y se aprende tanto que podría decirse que es solo por esos que vale la pena perder un amigo y no es que valga realmente más bien atenúa el dolor el saber que en el proceso se aprendió.

En mi balance de año ese fue el mayor aprendizaje y la mayor perdida, recupere una amiga del alma y perdí un amigo un parcero, en mi caso la alegría tranquilizo el dolor, y me queda el consuelo de que por mi parte pedí perdón, di mi brazo a torcer y hasta cedi sin ser culpable, ya cicatrizo y los tejidos internos parecen haber sanado, algunas veces como en navidad el recuerdo vuelve y deseas llamar y decir felices fiestas, pero a las decisiones ajenas hay que respetarlas, y si en mi camino quería que estuviese, en el suyo propio debía alejarse o lo quiso hacer, es así como este año de las muchas cosas vividas esta fue la que más me marco.

Un buen año más que eso un excelente año, y esperemos el próximo que muy seguramente traerá más retos que este, más problemas, más lágrimas, mas tristezas, mas angustias, más trabajo, mas carreras, pero así mismo, mas sonrisas, mas alegrías, mas amores, mas encuentros, mas aventuras, mas felicidad, de todo un poco más porque es básicamente un año más de VIDA, feliz y próspero 2011.

domingo, 12 de diciembre de 2010

EMPACANDO

En el 2005 me graduaba del colegio y mis días transcurrían entre el PROM, el vestido y zapatos ideales, un buen peinado, maquillaje, uñas, amigos, cartas, notas, y cuanta forma sentimental de recordarnos se nos ocurría, las fiestas se hicieron mas repetitivas nos alcoholizáramos en ese entonces con cerveza, vino, si había mas dinero, ron y guaro, y mientras andaba de parranda OH SORPRESA  pase a una universidad en mi profesión elegida, esta universidad estaba a 5 horas de distancia de mi casa y significaba además de mis estudios universitarios todo un prisma de oportunidades, INDEPENDENCIA no económica claro esta aun soy una mantenida y sin mucho orgullo de ello, vivir sola en una casa diferente, nadie me despertaría, nadie me regañarían, nadie se entrometería en mi vida, y que llevar a esta nueva casa, que necesitaba en esta nueva vida, de todo, cama, escritorio, silla, pc, cobijas, ropaaaaaaa, tv, algunos libros, un diccionario, algunos recuerdos de mis recién despedidos amigos, en esa oportunidad empacar resulto muy fácil.

hoy 5 años después, termine materias y se repiten las fiestas, las despedidas, las innumerables salidas, las alcoholizaciones han sido monumentales, muchas sonrisas que ocultan lo mucho que me desaguo en las noches o cuando recuerdo que ahora si me voy, ahora si dejo algo, son 5 veces 10 meses al año con eso pase 50 meses en esta ciudad, viviendo en esta casa y durmiendo en esta cuarto, hago cuentas y este cuarto ha tenido poster, cuadros, imagenes, pinturas, notas en las puertas, cambio muchas veces su diseño, este cuarto se fue llenando de a pocos de mi, mis cosas, sueños, tristezas, alegrías, fiestas, amigos, polvos, comidas, amanecidas, estudiadas, reuniones, peleas, cada día en este cuarto fue algo, incluso mis innumerables días y noches de sueño de locha de pijama, de cobija.
Empacar resulta todo un proceso, lo primero tener las cosas limpias, eso significo 15 horas de lavadora y tres días sin que ponerme, todas y cada una de las prendas mojadas y yo con una peste miedosa, siguiente paso donde guardar las cosas pues en cajas, me propuse encontrar cajas y esto ha sido otra odisea, en fin de semana no busque no insista, no hay ningún lugar donde le presten atención a su búsqueda de cajas, pero cuando ya las tiene en su poder y es hora de guardar dentro de ellas sus objetos personales, quizá le pase como a mi, si me siento al borde de la cama, y con una sonrisa y una lágrima bajando por mi mejilla, me pregunto que sera lo primero que debo guardar, y deseo tener un porro en mi mano y una botella de vino en el escritorio, y quisiera poder revivir a mi gato, para llevármelo a el también y entonces voy a su tumba en mi patio, y como quisiera haberle incinerado y llevarme sus cenizas, soy una estúpida fetichista, así empiezo a escuchar "dile a papá" cristina y los subterráneos, ese nudo en mi garganta de sentimientos que se confabula con esta peste que me desagua por la nariz, y sigo sentada mirándolo todo con la obligacion de guardarlo pero la imposibilidad de tomar una sola de las cosas introducirla en la caja y continuar.
Ya llore, ya fume, ya tome, y empaque, ahora en medio de cajas y bolsas llenas de basura, veo como un Dios a lo lejos, creyéndome superior, mi labor, varias cajas perfecta mente empacadas y selladas con la indicación de su contenido, las bolsas con cosas de las que antes me rehuse desaseare, para verlas todas juntas, como una arma cargada, con balas de recuerdos, amenazan dispararme y me gritan arrugadas con polvo encima que las saque de allí que una bolsa negra no es su lugar, que fueron importantes, que no tiene sentido que las abandone, que puedo llevarlas conmigo, me giro el humo quema mi garganta, pronto fluye por mis labios y el vino empapa mi lengua, y tengo en el fondo de mi escritorio la foto de mi gato ya muerto, hasta los platos donde servía el cereal están ya empacados, y al ver este cuarto pasado tan vació de futuro y lleno de presente, me pregunto en que momento me permiti aferrarme, quererlo, hacerlo mio, si como todo lo que hago mio se acaba, llega a su final, y es momento de partir.
falta algo y es lo mas importante, ya empacado lo que cargare a mi nueva casa, y con bolsas llenas de lo que prefiero dejar, resta destruir mi yo de este lugar, quito los cuadros que yo misma hice, quito mi arte, rasgo de la pared esas imagenes